Biografía de Ana Gabriel
María Guadalupe Araujo Yong, conocida en el
ambiente musical como
Ana Gabriel, es una cantante
y compositora mexicana. Ha triunfado ampliamente en el mundo del
espectáculo, al punto de ser llamada también la Diva de América.
Nació el 10 de diciembre de 1955 en Guamúchil, Sinaloa, México.
Además de cantautora, se ha dedicado a la producción de discos y a
la actividad empresarial en la música. Luna de América y La Ronca
de Oro, son otros dos apelativos que le dio asimismo la industria
del espectáculo.
Empezó a cantar en 1974 y estuvo unos diez años actuando en bares
de hoteles locales. Logró sus primer reconocimiento al lanzar su
sencillo
"No me lastimes más", en 1984. Ese tema, al
estilo balada pop en español, impactó en de la movida musical
mexicana.
En 2024, comenzó una gira continental para celebrar sus cincuenta
años en la música. Bajo el nombre de
Otro deseo más Tour,
inició en México con quince conciertos que resultaron
espectaculares. Realizados a casa llena, fueron muy aplaudidos por
el público y bien calificados por la crítica especializada. Luego
empezó su plan de presentaciones por varios países de la región. De
Argentina pasó a Chile, con dos presentaciones en el Gran Arena
Monticello. Fueron dos exitosos conciertos en ese casino, ubicado a
las afueras de la capital chilena. Se llevaron a cabo, con todo
éxito, el 17 y 18 de mayo de 2024.
Luego de esos dos shows, la cantante contrajo una fuerte gripe. En
poco tiempo, el cuadro de influenza se complicó con neumonía y la
gira debió ser reprogramada. El concierto de Santiago fue
postergado para el 7 de junio. Al cierre de esta nota, se esperaba
que de allí en adelante la cantante pueda continuar con su gira.
Que las demás fechas puedan cumplirse, tal como fueron pautadas
originalmente.
Significado del nombre
Ana Gabriel escogió este seudónimo a finales de los setenta, por
sugerencias de Edi Vladimir. Este era su mánager de entonces, quien
le hizo saber que necesitaba promocionarse con un nombre más corto.
La admiración que sentía por
Juan
Gabriel, influyó en el apodo que finalmente adotptó. Y con el
que se haría llamar desde entonces.
Más adelante, Ana Gabriel conocería y llegaría a trabajar con el
Divo de Juárez. Además, en alguna ocasión debió aclarar que no eran
familia. Solo estaban unidos por lazos de trabajo y de admiración
mutua.
Niñez, Juventud y Vida Familiar
Ana Gabriel creció en el seno de una familia de clase media. Su
padre se llamó Raúl Araujo Valenzuela y su madre, de ascendencia
china, Isabel Yong. Este mestizaje racial y cultural dio como
resultado a una muchacha con un carácter y personalidad únicos.
Se interesó en la música desde que era una niña. Por esa época
soñaba despierta con ser una estrella del firmamento musical.
Además, con frecuencia se la veía cantando y tratando hacer algunas
canciones. "Desde los 6 años me di cuenta [sic] que me gustaba
cantar y componer, una bendición de Dios, que pocos tienen la
fortuna de darse cuenta, y a pesar de mi corta edad, yo estaba
decidida a llegar a los corazones de muchos", comentó la cantante
ya siendo famosa.
Sin embargo, nunca recibió educación musical. "Los primeros y
únicos consejos fueron de mi abuelo materno Roberto, nombre que le
pusieron en México pues su verdadero nombre era Yang Quing Yong
Chizon, originario de China", dijo en una ocasión la artista sobre
esa etapa. Contaba, eso sí, con un talento excepcional para el
canto.
Cuando tenía quince años de edad se mudó con familia a Tijuana, a
más de mil cuatrocientos kilómetros de su natal Guamúchil. En esa
ciudad fronteriza con Estados Unidos, todo el grupo familiar
esperaba conseguir mejores condiciones de vida. Una vez
establecidos, la joven continuó los estudios de Contabilidad que
había comenzado en su ciudad de origen.
Inicios de Ana Gabriel en la Música
na Gabriel empezó a cantar, a mediados de setenta, en ciertos bares
de algunos hoteles de Tijuana. Dio esos primeros pasos en la escena
musical, sin abandonar el curso sobre Contabilidad que había
iniciado. Por ese tiempo, varios representantes de las disqueras le
cerraron las puertas. Decían que su estilo musical no era
comercial, que debía cambiarlo si quería triunfar.
A pesar de su inexperiencia, la joven se mantuvo en sus trece.
Convencida de su vocación y de su talento, no les hizo caso.
Además, estaba segura de que con su manera de cantar encontraría
una oportunidad para triunfar. Decidió darse un año más para
conseguir el respaldo de un sello discográfico. Caso contrario, se
dedicaría a la Contabilidad.
En 1984 fue invitada a
Valores Juveniles, un concurso
musical de la televisión mexicana producido y transmitido por
Televisa. La joven participó solo como compositora y su tema,
"No me lastimes más", quedó en segundo lugar. Este triunfo
representó un empuje para su incipiente carrera de cantautora. Por
esa época, Juan "El Gallo" Calderón le aseguró un gran futuro como
cantante. La visión que entonces tuvo este conocido productor de
televisión y periodista mexicano, de origen español, resultó
completamente acertada.
Género musical
Ana Gabriel optó, desde el principio, por la música romántica en
español. Durante su carrera musical ha interpretado música
mariachi, ranchera, balada y pop latino. Son géneros musicales que
compaginan con la personalidad y el temperamento de esta singular
cantautora sinaloense. Combinan perfectamente con su registro
vocal.
Al principio, varios directores artísticos de algunas casas
discográficas le manifestaron que su estilo no era comercial. Le
sugirieron que tenía que cambiarlo si quería triunfar.
Afortunadamente para ella -también para sus millones de
admiradores-, hizo caso omiso de esa recomendación.
Sus principales influencias fueron dos grandes la música mexicana,
como
Agustín Lara y María
Grever.
Su voz de contralto ha sido descrita como única, por algunos
críticos. Dentro de ese registro, el más grave para el género
femenino, cuenta con un matiz especial. Paradójicamente, su tono
ronco le ha dado una especie de marca personal. Se dice que
consigue notas, a las que más ninguna cantante de música popular ha
podido llegar. Con esos atributos ha conquistado a millones de
aficionados, dentro y fuera de México.
Trayectoria y Legado
Ana Gabriel ha lanzado, desde que debutó en el mercado
discográfico, medio centenar de discos de larga duración. En las
cuatro décadas que median entre 1980 y 2020, estrenó más de veinte
álbumes de estudio. Cuatro discos en directo, tres colaborativos y
una veintena de recopilatorios, también de ese período, completan
la cuenta indicada.
Vista así, panorámicamente, su exitosa carrera musical puede verse
como fácil y directa. Si bien ha cosechado grandes triunfos, los
años iniciales fueron difíciles. La primera década resultó todo un
desafío. Gracias a su gran vocación musical, también a su
perseverancia, pudo sortear los obstáculos que se le
presentaron.
Hoy la encontramos celebrando, con una gran gira continental, su
50° Aniversario en la música. Es preciso, sin embargo, regresar a
sus inicios, para conocer más de cerca su trayectoria en la escena
musical.
Cuando Ana Gabriel contaba veinte años de edad, se dedicaba a
cantar en algunos bares de Tijuana. Por ese tiempo, interpretaba
éxitos de diversos cantantes famosos de la escena musical mexicana.
Cantaba ya con la voz ronca, que la distinguiría más adelante.
Bajo el seudónimo de Lupita Araujo, en 1980 grabó su primer álbum.
Con el nombre de
"Único", el disco contiene ocho canciones
que no tuvieron ningún impacto. Temas como
"Pecado original",
"Con un mismo corazón" o
"A pesar de todos", son de
ese trabajo inicial.
Ese trabajo discográfico estaba destinado al fracaso. Imposible que
la cantante levantara vuelo con un trabajo así. El álbum tuvo poca
promoción o, mejor dicho, no fue promovido en absoluto. Además, la
interpretación fue considerada dentro del "género de ficheras".
Este era un estilo de música común en muchos bares y cabarets,
aunque poco comercial en esa época.
Pero más importante, la joven había sido obligada por la disquera a
"cantar en un tono limpio". Se le prohibía el "ronquido" que tan
famosa la haría el futuro. El sello discográfico argüía que, al
cantar con un "tono limpio", su registro vocal le duraría más.
Paradójicamente, la voz empezó a fallarle muy rápidamente. Al
forzarse a cantar de una forma tan distinta a la que estaba
acostumbraba, se quebrantó. El álbum fue un fracaso pero la
muchacha insistió en cantar con su voz natural, ronca.
La suerte le cambiaría a mediados de esa década de los ochenta.
Después de su exitoso desempeño en el concurso de Televisa, su
carrera musical tuvo otras oportunidades. Con su tema
"No me
lastimes más", empezó a darse a conocer en el ámbito nacional.
Para ese momento tenía como mánager a José Barrientos y
consiguieron el respaldo de una empresa discográfica relevante:
C.B.S. Esta pasaría, más adelante, a funcionar como Sony Music.
A partir de entonces vendría un éxito tras otro. Su álbum de
estudio
“Un estilo”, salió en mayo de 1985 con once
canciones. De esta producción discográfica son los siguientes
temas.
“¿Qué nos pasó?”,
“Búscame”,
“Sin ti
no sé amar”,
“Lo quiero todo” y
“Pienso en
ti”. Asimismo,
“Quién te crees que soy”,
“Promesas”,
“Amor sin memoria”,
“No me
lastimes más”,
“Déjame vivir” y
“Que sea por
amor”.
Un año después, Ana Gabriel lanzó al mercado el disco
“Sagitario” con el sello discográfico C.B.S. A este álbum
pertenecen temas como los siguientes.
“Mar y arena”,
“Y aquí estoy”,
“Eso no basta”,
“Tú y
yo”,
“Beso prohibidos”,
“Que poco hombre” y
“Malvado”. De esta producción es igualmente
“A tu
lado”, tema con el que se presentó en un importante certamen.
Se trató del Gran Premio de la Canción Iberoamericana o Festival
OTI de la Canción, donde quedó en quinto lugar.
En 1987, Ana Gabriel publicó su tercer trabajo discográfico,
grabado en estudio. Con el título de
“Pecado original”,
contó con el apoyo del director español, Mariano Pérez Bautista. De
este álbum sobresalió el tema
“¡Ay amor!”, de la autoría
de la misma cantante. Con esa pieza concursó nuevamente en el
Festival de la OTI, esa vez celebrado en Portugal. Consiguió el
tercer lugar de esa exigente competencia.
“¡Ay amor!” logró la posición catorce, en el listado Hot
Latin Songs del Billboard estadounidense. Con este nuevo éxito, la
cantautora sinaloense aumentó su prestigio en México, además de
ganar proyección internacional.
Un año después, la cantante sacó al mercado la producción musical
“Tierra de nadie”, con diez canciones. Contó nuevamente
con la colaboración de Mariano Pérez Bautista. Además del tema del
mismo nombre, se citan los siguientes.
“Simplemente
amigos”,
“Es el amor quien llega”,
“Soledad”,
“Qué puedes hacer por mí”,
“Recuerdos”,
“Contigo” y
“Voy por
ti”.
Este álbum se convirtió en un rotundo éxito. Se vendieron más de
cuatro millones de copias, en todo el mundo. Ocupó el primer lugar
de la lista Latin Tops Albums, de la revista estadounidense
Billboard. Con ese resultado, Ana Gabriel se hizo merecedora en
1990 del Premio Lo Nuestro mención Álbum Pop Del Año.
En diciembre de 1989, publicó su disco
“Quién como tú”.
Fue respaldado por el sello de C.B.S., bajo la dirección de Óscar
Gómez. Contiene diez canciones inéditas, varias de ellas
mencionadas a continuación.
“Adiós tristeza”,
“Algo”,
“Hice bien quererte (Lambada)”,
“Sólo
quiero ser amada”,
“Déjame sola” y
“Fui yo”.
El tema del mismo nombre resultó un tremendo éxito.
Ese mismo año, el disco fue galardonado en la categoría Álbum Pop
Del Año de los Premios Lo Nuestro. Pero además, llegó al primer
lugar en la lista Latin Tops Albums, de la revista Billboard de
Estados Unidos.
Por esa época, Ana Gabriel realizó diversas presentaciones en vivo.
La asistencia a esos shows fue multitudinaria. El público celebraba
cada interpretación con largos aplausos. Algunos críticos han
comentado que eran espectáculos fascinantes, apoteósicos. Su primer
álbum en directo fue producto de esos maravillosos conciertos.
Salió publicado en septiembre de 1990, precisamente con el nombre
de
“En vivo”. Este trabajo discográfico también fue un
gran éxito comercial. Las ventas superaron los cuatro millones de
copias. Por esta producción musical, la cantante estuvo nominada de
nuevo a los Premios Lo Nuestro, aunque no resultó ganadora.
En 1991, publicaría su séptimo álbum de estudio. Llevó por título,
“Mi México”. El año siguiente, Ana Gabriel tuvo bastante
actividad en la industria discográfica. Estrenó su octavo disco de
estudio, con el nombre de
“Silueta”. Fue editado por el
sello discográfico Sony Discos. Además, lanzó los recopilatorios
“The Best” y
“Personalidad: 20 éxitos”,
igualmente con Sony Discos. Estas producciones musicales fueron muy
bien recibidas por el público y la crítica especializada.
Su próximo álbum de estudio salió en noviembre de 1993, con el
nombre de
“Luna”. De los trece temas que contiene, se
mencionan los siguientes.
“Tu nombre es traición”,
“Pacto de amor”,
“Somos dos”,
“Me estoy
enamorando”,
“Sé que te vas” y
“Eres
diferente”.
El tema que da título al álbum, merece un comentario aparte. Fue
interpretado a dúo con el Divo de Juárez. Con esa colaboración, la
cantante cumplió uno de sus grandes sueños: el de cantar junto Juan
Gabriel.
Este performance resultó especialmente exitoso en algunas listas de
la revista Billboard estadounidense. Llegó al sexto puesto del
Latin Pop Albums y al noveno del Top Latin Albums, de la mencionada
publicación. Pero además,
“Luna” recibió disco de platino
de por RIAA (Recording Industry Association of America).
En 1994, Ana Gabriel lanzó
“Ayer y hoy”, su décimo álbum
de estudio. El disco, producido por ella misma, contiene doce
canciones con las que rinde tributo a varios ídolos de la música
popular mexicana. Entre ellos, Agustín Lara,
José Alfredo Jiménez, Juan
Gabriel,
Armando
Manzanero y Cuco Sánchez.
“Como agua para chocolate”,
“Mírales, escúchales”
y
“Que manera de perder”, son piezas de ese disco.
Asimismo, entre otras,
“Dos locos de amor”,
“Tú lo
decidiste”,
“Parece que fue ayer”,
“Vámonos”
y
“No tengo dinero”. Por este trabajo discográfico, la
artista fue nominada nuevamente a los Premios Lo Nuestro. El álbum
tuvo un excelente resultado comercial, siendo certificado con disco
de platino.
La Diva de América, como ya se le conocía en los noventa, lanzó en
1994
“Joyas de dos siglos”. En este nuevo trabajo
discográfico, grabado en estudio, tuvo la colaboración de Diana
Verónica Paredes. El disco obtuvo varios reconocimientos, entre
ellos la nominación Álbum Regional Mexicano en los Premios Lo
Nuestro. Por el volumen de ventas, fue certificado platino.
Dos años más tarde, entregó al mercado su disco llamado
“Vivencias”. Con este nuevo larga duración, llegó a la
docena de álbumes grabados en estudio. Fue respaldado por el sello
discográfico Sony Music Entertainment México. Temas como
“No te
hago falta”,
“Yo no te dije adiós” y
“No
sabes”, son de este disco. Asimismo,
“Es tarde ya”,
“Esta noche”,
“Miedo”,
“Que haré sin ti”
y
“Under The Boardwalk”.
En los años siguientes Ana, Gabriel continuó con su exitosa
actividad musical. Giras de conciertos, grabaciones en estudio y en
directo, fueron parte de su agenda. Además, estuvo muy activa
concediendo entrevistas y en la edición de algunos álbumes
recopilatorios.
“Con un mismo corazón”,
“En la plaza
de toros México”,
“Soy como soy” y
“Eternamente”, son parte de sus otros trabajos
discográficos.
Un disco al que apostó mucho, lo editó a principios de 2001. Ese
año, decidió que era un buen momento para otro recopilatorio. La
Ronca de Oro, otro de los apelativos con que también se le conoce,
publicó un álbum muy significativo. Incluyó las que consideraba sus
mejores canciones, las que más fama le dieron inicialmente. Esta
producción musical recibió el nombre de
“30 grandes éxitos (una
voz para tu corazón)”. Salió al mercado en un álbum,
conformado por dos discos compactos.
En ese mismo año publicó
“Huelo a soledad”, otro de sus
discos de estudio. Entre los temas de esa producción musical, se
mencionan los siguientes.
“Tanto amor”,
“Me he cansado
de ti”,
“Cuando tienes ganas”,
“Miento a mi
verdad”,
“Amado mío” y
“Amigo amante”. Por
este disco, Ana Gabriel fue nominada de los Premios Billboard de la
Música Latina. La canción homónima llegó al puesto ocho de la lista
Hot Latin Songs, del Billboard estadounidense.
En noviembre de 2003, La Diva de América estrenó un disco de
estudio con un título muy singular.
“Dulce y salado” es un
nombre inspirado en la mezcla de sensaciones que se dan en la vida.
Es la combinación de estos dos sabores, lo que hace que la
existencia sea tan especial. El álbum, principalmente de música
ranchera, tiene alusiones a su querida tierra. Le deparó otro
reconocimiento de la industria discográfica. Ganó la categoría
Álbum Regional Mexicano Del Año, Grupo Femenino/Artista Solista
Femenina, en los Premios Billboard de Música Latina.
“Dulce y
salado” figuró ese año en los mejores veinte de temas latinos,
en Estados Unidos.
Meses antes, ese mismo año, Ana Gabriel había participado en un
show que merece ser recordado. Intervino en el homenaje televisado
que se le rindió a la Reina De La Salsa,
Celia Cruz. Este evento fue organizado
y transmitido por la cadena televisiva estadounidense Telemundo, en
marzo de 2003.
Algunos de sus trabajos discográficos, publicados posteriormente,
llevaron los siguientes títulos.
“Tradicional”,
“Historia de una reina”,
“Dos amores, un amante”,
“La reina canta a México” y
“Canciones de amor”.
Asimismo, entre otros,
“Arpeggios de amor”,
“Brillantes” y
“Renacer… Homenaje a Lucha
Villa”.
Dos discos colaborativos, con su admirado amigo Juan Gabriel,
salieron en la primera década del siglo XXI. Publicados en 2007 y
2008, llevaron, respectivamente, los nombres de
“Los Gabriel…
Simplemente amigos” y
“Los Gabriel: Cantan a México”.
Su otro disco colaborativo, titulado
“Juntos”, salió ese
mismo año 2008 con la participación de
Pepe Aguilar.
En 2014 Ana Gabriel fue premiada en el Festival Internacional del
Canción de Viña del Mar, en Chile. En esa edición fue galardonada
como la Artista Más Popular del evento. Tres años más tarde,
ingresó al Latin American Songwriters Hall Of Fame. Este Pabellón
de la Fama de los Compositores Latinos está auspiciado por un ente
similar, de la ciudad de Nueva York. El objetivo es preservar,
honrar y celebrar el legado de los grandes compositores latinos, en
todos los géneros musicales.
Para 2019, La Diva de América tenía planificadas varias
presentaciones por diferentes ciudades del mundo. No obstante,
debió suspender varias fechas, por problemas de salud.
A lo largo de la trayectoria musical, Ana Gabriel también ha
compartido escenario con otros artistas de gran renombre
internacional. Entre ellos,
José Feliciano,
Rocío Jurado,
Plácido Domingo,
Pedro Fernández,
Vikki Carr,
Vicente Fernández y Armando
Manzanero.
En diciembre de 2020, lanzó
“Por amor a ustedes”. Este es
el último disco de estudio que ha estrenado hasta ahora. En los dos
años siguientes, estuvo de gira mundial como parte de la promoción
de este álbum.
En noviembre de 2021, la singular cantante sinaloense ingresó al
Paseo de la Fama, en Hollywood. Recibió la estrella número 2.707,
una distinción con la que hizo realidad otro de sus grandes sueños.
Durante la ceremonia, Ana Gabriel recordó la promesa que alguna vez
les hizo a sus padres. En una ocasión les aseguró que su nombre
estaría junto al de los grandes artistas internacionales. La
satisfacción que sentía era muy grande. Había cumplido su promesa,
logrando una de las metas más exigentes que plantea la industria
musical. Pero además, se convirtió en la primera artista sinaloense
en recibir tan alto reconocimiento.
La Ronca de Oro ha vendido, en todo el mundo, más de cuarenta
millones de copias de sus discos. Se ha convertido en la cantante
mexicana de mayor éxito comercial, en la escena internacional.
Este éxito se debe a su maravillosa voz y al sentimiento que pone
en cada una de sus interpretaciones. En definitiva, a su talentoso
trabajo de cantautora. Varios discos de su extenso y celebrado
catálogo, impactaron especialmente en la industria discográfica. Ha
logrado seis álbumes número uno en el top 10 de la lista Hot Latin
Songs, del Billboard estadounidense. Más de veinte de sus éxitos,
figuran en esa importante cartelera.
Después de medio siglo en la industria musical, Luna de América o
La Ronca de Oro, sigue vigente. Muchos de sus seguidores esperan
que La Diva de América supere la neumonía que la aqueja
actualmente. Que pronto esté otra vez en la palestra musical,
prosiguiendo su exitoso
Otro deseo más Tour. Ana Gabriel
sabe que millones de sus fanáticos están pidiendo por su salud. La
mayoría de ellos, sin tener planificado asistir a los conciertos de
la gira que ha debido suspender. La admiración que sienten por
ella, comenzó hace muchos años. Cincuenta años atrás, para ser
exactos.
Vida Personal
Ana Gabriel es una artista de fama internacional, por supuesto
reconocida también en todo México. Sin embargo, la exitosa
cantautora ha sabido mantener su vida personal, alejada de la
“prensa rosa”. Estos medios, sin embargo, no dejan de asomar
algunos detalles íntimos de la afamada artista. Durante muchos
años, han especulado sobre las preferencias sexuales de La Diva de
América.
Se ha dicho, incluso, que por más de tres décadas permaneció unida
sentimentalmente a su vestuarista, Diana Verónica Paredes. Esta es
la madre biológica de Diana Alejandra, hija adoptiva de la estrella
sinaloense. La joven de veintinueve años es, además, un apoyo
incondicional para la cantante.
Mientras Ana Gabriel no lo diga abiertamente, esa y otras
relaciones que se le atribuyen pertenecen al campo de la
especulación. Es el precio que muchas veces deben pagar las figuras
públicas. Tanto más, cuanto mayor sea su fama.
En todo caso, ninguno de esos comentarios le quita nada a su bien
ganado espacio en el firmamento musical. Ana Gabriel es una
verdadera estrella. Y lo sabe.