Biografía de Carlos Guevara
Carlos Guevara fue un cantante, compositor y
educador colombo-venezolano. Nació en Achaguas, Apure, Venezuela,
el 4 de mayo de 1973; y murió en esos mismos llanos venezolanos, el
23 de febrero del 2007, a los treinta y tres años de edad. Ganó
reconocimiento con temas como "Remembranzas de mi vida" y
"Mi compromiso". Durante su exitosa carrera musical,
obtuvo en 78 oportunidades el primer lugar en distintos festivales
celebrados en los llanos colombovenezolanos.
Significado del nombre
Carlos Guevara utilizó su mismo nombre de pila para hacerse conocer
en el ámbito musical.
Niñez, Juventud y Vida Familiar
Carlos Guevara nació y creció en Venezuela. Se interesó mucho más
por la música en la adolescencia, cuando a la edad de catorce años
empezó a interpretar algunas canciones en diferentes eventos
musicales de Achaguas.
Inicios de Carlos Guevara en la Música
Carlos Guevara se dio a conocer con su participación en varios de
los festivales y concursos de música llanera de los que
frecuentemente se realizan en los llanos de Venezuela y Colombia.
Intervino, entre muchos otros, en eventos como El Silbón, La Panoja
de Oro, El Florentino de Oro y El Alma Llanera.
Género musical
Carlos Guevara se destaca por sus canciones en género llanera. Por
su voz limpia y sonora, como pocas, fue llamado Cantaclaro, y un
apodo del que se enorgullecía siempre, al punto de plasmarlo en su
canción ”El Último Cantaclaro”, un homenaje a los
cantaclaros de Venezuela y Colombia.
Dentro de su particular estilo musical, acompañado básicamente por
arpa, cuatro y maracas, cantó música recia y pasajes. Los temas
fueron diversos, referidos a los campeones del coleo, al cuatro, a
sus amores, a los recuerdos de su infancia, a la doma del amor
salvaje, entre otros motivos relacionados con la vida de los llanos
venezolanos
Trayectoria y Legado
En 1995, Carlos Guevara lanzó su primer trabajo discográfico,
"Tristeza de un poeta", con el que obtuvo éxito. Dos años
después, grabó su segundo disco de larga duración, que contiene el
tema "La potra que me tumbó".
En el año 2000, estrenó el disco "Mi compromiso", del que
salieron, entre otros, los sencillos "Prisioneros de tus
besos", "Sin ti no valgo nada" y "Mi luna y mi
sol".
Seis años más tarde, Carlos Guevara lanzó "Remembranzas de mi
vida", un álbum que tuvo resonancia en el mercado de la música
llanera. No podía sospecharlo siquiera, pero ese disco de 2006,
sería el último de su carrera.
El lunes 19 de febrero de 2007, Carlos Guevara estuvo en el
amanecer llanero de la 35° celebración de las Fiestas de la
Trinidad de Orichuna, en el municipio Páez del estado Apure. Había
cantado más de una hora seguida, pero estaba contento y lleno de
energía. Por esa época se le tenía como el mejor intérprete de
música folclórica en los llanos colombovenezolanos, según los
conocedores del género, por su cantar alegre, sonoro, recio,
diferente, fuerte y sentimental a la vez.
Al momento de despedirse del público, todos estuvieron de acuerdo
en reencontrarse justo un mes después, en las fiestas de Elorza,
“Nos vemos en Elorza, el 18 de marzo, no se les olvide, hasta la
próxima”... pero no fue así. Ese mismo día sufrió un serio
accidente de tránsito y murió unos días después.
Carlos Guevara cosechó varios premios y reconocimientos a lo largo
de su carrera musical. Recibió cerca de ochenta premiaciones en
diversos festivales de música llanera en los que participó, además
de otros galardones por su talentoso trabajo interpretativo.
Vida Personal
Carlos Guevara era estimado también por su sencillez y su humildad,
rasgos típicos del llanero. Con su característico estilo de llanero
de alpargata, sombrero y caballo, además de amansador de los
buenos, se ganó el cariño de mucha gente.
Durante siete años fue maestro de escuela en Achaguas, una
actividad que compartió con el canto. A sus alumnos les enseñó
también el amor por la música, estimulando en ellos sus habilidades
para el trabajo cultural.
Muerte
Carlos Guevara murió el 23 de febrero de 2007. Cuatro días antes
había sufrido un aparatoso accidente de tránsito, entre Achaguas y
San Fernando de Apure, que lo mantuvo luchando por su vida.
Lamentablemente no logró.
A su entierro asistieron destacados intérpretes venezolanos de
música llanera, además de un numeroso público que se hizo presente
para despedirlo. En pocos años se había ganado el cariño de mucha
gente.
Comenzó muy joven, como muchos llaneros que aprenden desde temprana
edad la música, las faenas y el folclor de su región. Un inesperado
suceso lo sacó temprano de la escena musical. Sin embargo, en dos
décadas Carlos Guevara, quien había comenzado a cantar a los
catorce años de edad, dejó una huella entre los intérpretes y
aficionados a la música de arpa, cuatro y maracas, tan cara a los
lugareños de los llanos colombovenezolanos. “Quien le canta al
amor, no muere nunca”, así dicen algunos de los admiradores de ese
singular coplero que fue Carlos Guevara.