En la historia de la música siempre ha habido tendencias que van y vienen. Una que está arrasando entre la juventud de hoy es la música trap. La historia del trap no es particularmente nueva, pero si es tan fascinante como sus creadores, el ritmo y emociones que este género produce.
El trap es un subgénero que inicialmente pertenecía al ramo del hip hop del sur de Estados Unidos y que con los años se incorporó a la electrónica a el hip hop comercial y más recientemente al reggaeton. Existe una pequeña, pero notable, diferencia entre cada una de esas variedades de trap, especialmente la electrónica que también se denomina EDM trap (Electronic Dance Music).
Este sub-género se diferencia de otros géneros por su ritmo, arreglos electrónicos densos y sombríos. Puede ser muy lento y a la vez rápido. Lo importante no son las notas musicales, sino los efectos sonoros. Por lo general incorpora ritmos bajo fuerte del sintetizador Roland TR-808 con capas de otros sintetizadores y cuerdas cinemáticas.
El término "trap", que se traduce literalmente al español como “trampa”, proviene del argot estadounidense para denominar lugares de compra y venta de drogas ilegales. Dicho término no tiene relación etimológica con el verbo "trapichear". Sin embargo, nuestro enfoque en este artículo se relaciona más con el trap como sub-género del reggaetón y su influencia en la escena musical latina actual.
Hasta hace poco seguía siendo un estilo musical subterráneo del cual la población en general no conocía mucho y menos en el mercado general comercial. El género ha enfrentado mucha controversia, especialmente el trap en español por su presunta obscenidad. El trap ahora empieza su alce dado a la Internet y una nueva escuela de jóvenes cantantes que le están poniendo una nueva cara.
Las letras del trap por lo general narran de forma explícita historias de lo que viven algunas personas en los guetos (barrios), como el tráfico de drogas, riñas, armas, sexo, fiestas, excesos, dinero, marginalidad y decadencia. Fue denominado trap precisamente porque los exponentes porque expresa una vida de calle.
Como consecuencia, el trap latinoamericano ha sido ampliamente criticado por una buena parte del público, e incluso por algunos artistas de reggaetón, debido a su contenido explícito, que hace alusión al sexo (derivado de una relación infiel), drogas, prostitutas y manejo de armas. Todo esto hablado de manera abierta y tajante, razón por la cual muy pocas canciones logran tener promoción en la radio. Es más que nada por medio de la Internet que el trap se ha dispersado por latinoamérica.
A pesar que el trap latino es fuertemente criticado, muchos exponentes de la vieja escuela del reggaetón como Lito & Polaco, Tempo y Falo lo apoyan, aun opinando que las letras de este subgénero son más fuertes que las del reggaetón de la década de 1990.
Los primeros artistas en incursionar en este sub-género por parte del reggaeton fueron Arcángel, Messiah, Yaga & Mackie, Randy, De La Ghetto, Nicky Jam, Salguero, entre otros cantantes principalmente reggaetoneros de Puerto Rico.
Otros cantantes principalmente reggaetoneros de Puerto Rico se atribuyeron a fines de 2016 el haber comenzado con el movimiento del trap latino mediante canciones como "El Pistolón" y "Sensación del Bloque", a pesar de que en 2007 (año en donde esas canciones fueron lanzadas) no se hablaba de ese subgénero.
En la actualidad está surgiendo una nueva escuela de “traperos”. Entre ellos incluye: Bad Bunny, Anonimus, Anuel AA, Bryant Myers, Brytiago, Darell, Noriel y Ozuna entre otros.
La tendencia de la música trap aún está en uno de sus mejores momentos. Será interesante ver como se sigue desarrollando el género y si se convertirá en algo mucho más comercial. Al ritmo que va el trap, no sorprenderá si algun dia se ven artistas como Thalia haciendo duetos con artistas del trap como han hecho con reggaetoneros.