Durante la temporada Summer en Norteamérica, el canadiense fue el artista que más pegó sus sencillos. Además, fue el amo y señor de un challenge en las redes sociales que, de la noche a la mañana, se hizo viral en todo el mundo.
Para muchos expertos musicales y otros artistas, ambos raperos son la imagen de la vieja y la nueva cara de la música urbana, lo que ha caracterizado los enfrentamientos que se construyeron durante años en el género entre estos dos cantantes. Sin embargo, el error de algunos conocedores de rap, fue pensar que el White Boy de Detroit estaba fuera de moda. Eminem no lo pensó dos veces y, sin avisar y sin dar pistas, estrenó su nuevo álbum de manera sorpresiva.
“Ponme la pista, voy a dibujarlo como un libro de colores. Tienes algunos puntos de vista, pero todavía estás por debajo de mí. Los míos son más altos, así que cuando comparas nuestros puntos de vista, te paso claramente por encima. Yo no recito el coro a menos que yo lo haya escrito”, dice Eminem en una de sus nuevas canciones.
Esto, como era de esperarse, marcó una duda imponente en los medios pues, desde ya, muchos de ellos han interpretado esa parte de la canción como una nueva forma para debatir sobre si a Drake le escriben sus canciones.
Asimismo, al intérprete de su más reciente éxito In My Feelings (#KikiChallenge) y God’s Plan, se le acabó el mandato en las listas musicales. Eminem, con este nuevo álbum, ya es el que encabeza la cima de los álbumes más vendidos en Estados Unidos y Reino Unido donde, al parecer, le han dado su apoyo al estadounidense por volver a cantar de forma beef (ataque verbal a otras personas), y precisamente de eso hay de sobra en Kamikaze, donde se encuentra una dura crítica a la industria.
En tan solo dos días, Eminem logró mandar a la banca al canadiense como el artista más escuchado en Spotify. También le ha arrebatado su posición 1 en la lista de los sencillos más vendidos en Estados Unidos.