Justin Bieber se ha declarado culpable
por los cargos de asalto y conducción imprudente, en relación a un
accidente de tráfico que tuvo lugar el año pasado en Canadá.
El cantante, que compareció ante el juez vía video este jueves, fue
arrestado en el momento del accidente, después de que un minivan se
impactara contra la cuatrimoto en la que viajaba junto a su
entonces novia, Selena Gomez.
La pareja se encontraba en Stratford de vacaciones, "que
lamentablemente fueron perturbadas por la presencia indeseada de
los paparazzis", según declaraciones de su abogado Brian
Greenspan. Lo que habría desembocado en un “altercado
físico” entre los conductores de ambos vehículos, según informó
en su momento la policía provincial de Ontario.
El tribunal retiró un cargo más grave, el de conducir deforma
peligrosa, y también lo absolvió del cargo de agresión, lo cual
significa que fue hallado culpable pero en su registro no figurará
ninguna condena de acuerdo al código penal canadiense.
Sin embargo, Bieber tendrá que pagar una multa de 750 dólares
canadienses por haber conducido imprudentemente.
Este no sería su primer encontronazo con la justicia, ya que en
2014 el canadiense fue condenado por por cargos similares en Miami,
Florida. Por lo que tuvo que realizar una donación a una
organización benéfica y asistir a un curso de control de la ira
después de ser detenido al volante bajo la influencia del alcohol.